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El martes 10 de octubre se llevó a cabo el II Simposio Argentina – Japón en la Facultad de Ciencias Económicas. Este año se centró en una mirada al management y métodos japoneses que se están implementando en empresas argentinas.

Este encuentro fue coorganizado por la Embajada del Japón en la Argentina y el Club de Negocios Argentino Japonés (CNAJ), junto a la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). La inauguración estuvo a cargo de la presidente del CNAJ, Dra. Gabriela Yoshihara y del Sr. Embajador del Japón, Dn. Noriteru Fukushima.

Se realizaron dos sesiones. En la primera se expusieron dos visiones del management tanto en Argentina como en Japón. Para ello se encargaron de dar sus perspectivas el Ing. Marcos Rodríguez, perteneciente a la Gerencia de Proyectos Especiales del INTI, el Sr. Tatsuhiro Mitamura, Representante Residente en Argentina de JICA y el Ing. Damián Testori, Subsecretario de Política y Gestión de la PyME del Ministerio de Producción de la Nación.

Mientras que en la segunda sesión, a través de testimonios y experiencias de directivos de Honda, Sony, Industrias GUIDI y PLANAR, se pudo ahondar en la cultura de negocios entre ambos países.
Lucila Flombaum, socia fundadora de PLANAR, contó su experiencia sobre cómo es comercializar en Japón, mientras que el Ing. Carlos Pan, Director Industrial de GUIDI, el Ing. Javier D’uva, Gerente de Calidad e Ingeniería de Honda, y el Ing. Demian Cifre, Gerente de Recursos Humanos de Sony, mostraron de qué manera los métodos japoneses como el Kaizen o las 5S pueden ayudar a mejorar la calidad y productividad de una empresa.

Alternativa Nikkei entrevistó a algunos disertantes de este II Simposio Argentina – Japón.

Lo provechoso de estas conferencias

«Estos encuentros son muy positivos, sobre todo teniendo en cuenta la diferencia de cultura que existe entre un país y otro. Poder compartir cómo nosotros fuimos entendiendo y aprendiendo lo que es la cultura japonesa, es positivo. Pero no sólo eso, sino la forma en cómo ellos piensan las cosas, creo que ahí radica la gran diferencia entre ellos y nosotros», contó el Ing. Javier D’uva.

«La verdad que eventos como éstos no hay, se han perdido mucho, con lo cual la transmisión de esa experiencia de los japoneses y de cómo encaran la solución de las cosas cotidianas se ha dejado de lado. Entonces lo veo como algo positivo y que puede servir a cualquier empresa, no sólo a las que tenemos como origen de Japón», aseguró.

Cómo se trabaja en Honda

«Desde chico mi sueño era trabajar en alguna automotriz, de hecho soy Ingeniero Mecánico Automotriz. Lo que buscaba era tener la oportunidad de estar en una empresa grande y cuando se dio la oportunidad de entrar en Honda, dije: ‘Bueno, vamos a probar'», manifestó D’uva.

«Fue muy grato porque el primer año (2007) nos dijeron que íbamos un año a Brasil, a Sumaré, en la fábrica de autos, a trabajar directamente. Comenzamos sobre lo básico, a trabajar con el operario y al principio era un poco chocante porque no lográbamos entender por qué era necesario. Después de un año, lo terminamos entendiendo», dijo.

«Me identifico mucho en mi vida personal con lo que es la cultura japonesa y con la empresa. Hoy por hoy más allá de la posición que tengo, el poder trabajar dentro de Honda es un orgullo y una motivación adicional», expresó.

Trabajo en conjunto entre INTI y JICA

El Instituto Nacional de Tecnología Industrial tiene una larga historia con la Agencia de Cooperación Internacional del Japón. Más precisamente desde el 2004, cuando varios expertos japoneses vinieron a la Argentina para enseñar técnicas de producción como el Kaizen, entre otras herramientas de gestión de la productividad.

«En 2004 recibimos una misión de expertos. Nosotros conformamos una red de tecnología de gestión a partir de esto y luego en el 2008 arribó una nueva misión para fortalecer el crecimiento de esta red», sostuvo el Ing. Marcos Rodríguez. «Entre medio siempre estuvo la participación de expertos voluntarios de JICA y expertos nuestros que iban a formarse a Japón».

A partir del 2009 el INTI empezó a ser donante de cooperación junto con JICA: «Nosotros formados empezamos a trabajar con otros países de Latinoamérica e incluso de África. Entonces JICA, como resultado de su cooperación acá, mostró el trabajo que hizo junto a nosotros y enviaron expertos de INTI», afirmó.

De esta manera, INTI colaboró con JICA Nicaragua invitándolos como expertos para formar nuevos profesionales. «Actualmente estamos trabajando junto a Mozambique, en donde JICA nos convoca como expertos. También hemos estado en Paraguay, Uruguay y la verdad que esta cooperación nos ha posibilitado mostrarnos en el exterior. Por nuestra cuenta ya tenemos proyectos en Angola, Colombia, Ecuador, Cuba, Bolivia y todo tiene que ver con el impulso que le dio JICA al INTI», declaró.

«JICA ha apoyado mucho la difusión y la masividad de nuestro trabajo en publicaciones, seminarios, en poder traer expertos que muestren nuestros resultados, pero en general hoy estamos trabajando bastante autónomos en el asesoramiento y la consultoría a empresas para mejorar la productividad», relató.

Esta consultoría es un abanico muy grande de herramientas que plantea mejorar la productividad desde el punto de vista de optimizar el uso de los recursos. Esto tiene que ver mucho con el Kaizen, la austeridad, producir mucho con pocos recursos, como por ejemplo, los recursos naturales, donde Japón es un ejemplo a tomar, ya que no tiene demasiados, pero aún así produce abundantemente.

Vender en Japón

PLANAR es una marca de productos sustentables de diseño que posee una línea de billeteras y sobres en cuero reciclado estampado. «Trabajamos sobre el diseño simple y sincero donde se busca la forma más simple para generar el objeto», explicó Lucila Flombaum. «Por otro lado el producto, al ser tan simple comunica cómo está hecho el proceso productivo y hablamos de sincero porque como son tan simples, se ven tal cual son, qué material tienen, dentro del diseño responsable».

Con esta línea comercializan en Japón desde el 2014. «Tenemos un distribuidor allá con el que trabajamos muy en equipo. Se distribuye en tiendas de nicho, del tipo zakka, pequeños locales donde se destacan variedad de objetos muy particulares, que tienen cierto estilo de vida y una selección muy puntal», mencionó.

«Para nosotros es muy lindo porque allá se valora mucho el diseño. Pudimos viajar y recibimos un reconocimiento por parte de los distribuidores, de la gente que comercializa y que valora nuestro trabajo. Nos resulta llamativo, pero estamos muy orgullosos», aseguró.

Su llegada al país nipón fue casual, ya que la pareja distribuidora que se encuentra allá son japoneses que vinieron a la Argentina, compraron sus productos y al regresar les escribieron un mail interesados en comercializar. «No sabíamos cómo iba a funcionar, fuimos un poco a ciegas, pero en realidad ellos entendieron muy bien la marca y encontraron un lugar donde ubicarla». Cuenta que se mueven un montón para darla a conocer, asisten a ferias para conseguir mayoristas y que se desplazan por todo el país asiático.

«En el caso de Japón la idea es poder ir afianzándonos un poco más en el mercado, ya que cada vez crece más. El año entrante esperamos poder mejorar los tiempos y organizarnos mejor», consideró. «En cuanto a otros mercados, tenemos en mira EE.UU., Chile…buscar distribuidores para poder ofrecer la marca en nuevos lugares», finalizó.

Kaizen Tango, el nuevo proyecto de JICA

Hablamos con Tatsuhiro Mitamura, Presidente de JICA Argentina, que nos contó un poco más acerca de este nuevo programa de ayuda a las PyMES.

«Desde el mes de mayo una misión realizó un estudio detallado para el diseño de este proyecto. Ahora ya hemos acordado y firmado un convenio. Ya estamos listos para iniciarlo», aseguró Mitamura. «El objetivo es mejorar la competitividad y productividad de las empresas aquí en Argentina. Pero antes de esto, queremos hacer una fuerte capacitación a los asesores de INTI y luego vamos a ayudarlos para que acompañen a estas empresas».

«Nuestra meta es ofrecerle el servicio de Kaizen a 100 empresas. Actualmente estamos en un proceso de selección del primer grupo de empresas piloto, que son alrededor de 15. Dependiendo de la necesidad de cada una, primero se les hará un diagnóstico y tras seleccionarlas, lo haremos en conjunto con asesores de INTI y expertos japoneses», comentó.

«Yo les recomendaría que sean ‘de corazón abierto’ porque ellos van a enfrentarse a una nueva metodología japonesa. Habrá muchas cosas que aprender y tendrán que adecuarse a esto mirando el contexto argentino. Todos tienen que participar, no solamente el dueño de la empresa, sino también los trabajadores», concluyó.