El 23 de junio se presentó en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA) la exhibición de la ex-esposa de John Lennon, titulada Dream Come True, que será curada por Gunnar B. Kvaran y el director artístico del museo Agustín Pérez Rubio.
Es la primera exposición retrospectiva en la Argentina de Yoko Ono, pionera y figura ineludible del arte conceptual y participativo contemporáneo. La muestra está compuesta por más de 80 trabajos, que incluyen objetos, vídeos, films, instalaciones y registros sonoros producidos desde principios de los ’60 hasta hoy, y tiene como eje las llamadas Instrucciones, que Ono viene desarrollando desde hace más de sesenta años.
El título de la muestra puede ser leído como una metáfora de su trayectoria artística, pero también como un comentario a la situación global de nuestra época que, según Ono, puede ser mejorada a través de la participación conjunta y el intercambio creativo.
Usando un lenguaje claro y universal, Ono produce objetos, eventos, rituales y acciones, cuya precisa elaboración se completa a través de la participación del público. Las «instrucciones» son piezas compuestas por mensajes simples y poéticos, que invitan a los espectadores a realizar determinadas acciones, como «escuchar el sonido de la Tierra girando» o «encender un fósforo y observar hasta que se consuma«.
La amplitud de formas de obra que las instrucciones de Ono permiten, se ve claramente en la famosa instalación que surge de la instrucción de su pieza Pintura de techo, pintura del sí (1966), que dice: Sube a una escalera. Observa la pintura del techo con una lupa y encuentra la palabra «sí».
Pero esto no se podrá ver solamente en las salas del MALBA, sino que además la exposición y difusión de gran parte de las obras estarán en el espacio público, los medios masivos de comunicación, Internet y las redes sociales.
Habrá visitas guiadas los viernes y domingos a partir de las 17 horas, donde las personas se encontrarán con todo lo que Yoko Ono ha hecho a lo largo de su carrera artística que ahora llega a la Argentina y especialmente al MALBA, un lugar que a ella le gusta mucho y que conoció cuando vino hace 19 años.
Fuente: Prensa MALBA