Cada año en Japón se honra el trabajo en el día festivo “Kinro Kansha No Hi” para expresar gratitud por las labores y por poder mantener a la familia cada día. Pero, en Japón existe también la desocupación, el lado menos visto de la realidad.
El Día del (Agradecimiento por el) Trabajo se celebra cada 23 de noviembre y es un día de fiesta nacional desde 1948. Como es feriado, muchas familias aprovechan para realizar un día de viaje en su celebración.
Este día tiene su origen en el antiguo festival de cosecha “Niinamesai” en el que las comunidades locales oraban para obtener buenas cosechas en el próximo año. Después de la Segunda Guerra Mundial se estableció la fecha para conmemorar el establecimiento de los derechos humanos fundamentales, como así también los derechos de los trabajadores.
Hoy en día se realizan eventos en todo Japón para dar gracias al trabajo y se recuerdan los problemas relacionados con los derechos humanos, la paz y el medioambiente. Es común también que los niños en la escuela primaria hagan dibujos y los den como regalo en las estaciones de policía en agradecimiento a su labor de protección todos los días.
La otra cara de la realidad social
A pesar de que muchos ciudadanos tengan un trabajo que les permite vivir bien cada día y satisfacer sus necesidades básicas, el desempleo, los trabajos “marginales”, las arduas horas de trabajo que conducen a la depresión, son una realidad social en Japón que no hay que pasar por alto.
En mayo de 2014, Shiho Fukada, una fotoperiodista independiente, realizó un documental llamado “Trabajadores desechables de Japón: perdidos en la crisis mundial de desempleo”, que muestra el cambio de vida de trabajadores japoneses en relación a su trabajo.
El empleo de por vida que antes estaba garantizado, sufrió una transformación y muchas empresas terminan “descartando” a empleados o llevándolos a una profunda depresión con las arduas horas de trabajo sin descanso que, en muchos casos, termina en suicidio.
El documental, dividido en tres partes, muestra un lado extremo de la situación laboral en Japón:
1) Exceso de trabajo: Un problema social actual, que lleva a muchos trabajadores a sufrir depresión y en algunos casos terminan por quitarse la vida. “Creo que es una característica de los japoneses. ¿Si le dices a la compañía en la que trabajas que estás sufriendo depresión, te apoyarían? Al contrario, te dirían que ya no vayas al trabajo. Y no quedaría más alternativa que renunciar”, declara en el documental la esposa de uno de los trabajadores que quitó su vida. El hombre era arquitecto e ingeniero. Como bajó el rendimiento de la compañía en la que trabajaba, se vio obligado a trabajar en el área de ventas. Esto, sumado al exceso de horas de trabajo, lo llevó a sufrir una profunda depresión.
2) Refugiados en los cibercafés: La mayoría de las personas que viven en los cibercafés son empleados de medio tiempo que no tienen el dinero suficiente para alquilar un departamento. Cerca del 38 % de los empleados tienen trabajo temporal que, además de ser mal pago, se establece por contratos de muy corto tiempo.
3) La situación de Kamagasaki, Osaka: Este barrio de Osaka solía ser un lugar próspero donde miles de jornaleros iban en busca de trabajo en la construcción y la obra civil. Ahora hay cerca de 25 mil personas desempleadas y muchas de ellas, sin un hogar.
Una realidad social que no se debe ignorar, ya que detrás del Día del Trabajo también se encuentran historias de desarraigo y problemas sociales que se viven hoy en día.
El documental de Fukada en el sitio de Media Storm (japonés con subtítulos en inglés): http://mediastorm.com/clients/japans-disposable-workers-for-pulitzer-center