Con una visita oficial que no incluye a Argentina, el actual gobierno japonés pretende retomar la atención sobre Latinoamérica para reforzar lazos políticos, económicos y de afinidad histórica y cultural con la región.
El Primer Ministro Shinzo Abe estuvo de gira oficial por México, Trinidad y Tobago, Colombia, Chile y Brasil del 25 de julio al 4 de agosto. Aunque no visitó la Argentina, la Embajada de Japón en nuestro país a través de su Centro Cultural e Informativo comunicaba en una gacetilla los motivos y las expectativas sobre los resultados de la visita de Abe a América Latina.
Justamente a 10 años de la visita del exprimer ministro Koizumi, en 2004, y a 55 años de que su abuelo, el exprimer ministro Nobusuke Kishi estuviera por Brasil, Argentina, Chile, Perú y México en 1959, Abe quiere retomar el camino de apertura hacia estas regiones que iniciara su antepasado.
Amén de la búsqueda del fortalecimiento de las relaciones nipo-latinoamericanas a nivel político y económico, como simples ciudadanos latinos de ascendencia japonesa, englobados en la “comunidad nikkei”, lo más interesante parece ser el punto 3: “reforzar los vínculos especiales basados en las relaciones históricas de amistad y solidaridad” y de lo que se pretende promover hacia el futuro en esta cuestión, “dar impulso a los líderes de la próxima generación, a la amplia red humana y al intercambio cultural.”
En el comunicado oficial se resaltan los siguientes motivos para la visita oficial japonesa:
- Cooperar con América Latina, cuyos países comparten los mismos valores fundamentales y aumentan día a día su influencia internacional.
- Compartimos los mismos valores fundamentales tales como la libertad, la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho.
- Los 33 países de América Latina (entre ellos países miembros del G20 como Brasil, México y Argentina) tienen una gran influencia en el ámbito internacional.
- Cooperamos en una amplia gama de temas, entre ellos, en ampliar la participación de las mujeres y en acrecentar la intervención de los países en asuntos globales tales como el desarme, la no proliferación y la protección del medioambiente.
- Cooperar y trabajar juntos con la región como un motor de crecimiento de la economía mundial.
- (Latinoamérica tiene un) Mercado de 600 millones de habitantes (con un gran crecimiento de la clase media), centro de manufactura global (el doble de la ASEAN en cuanto a la producción automotriz), gran proveedor de recursos naturales (minerales, energía, alimentos).
- Aumento acelerado de la presencia de empresas japonesas en la región: América Latina es una de las regiones donde más ha crecido el número de empresas japonesas, desde 2011, en un año se sumaron 267 empresas más (en total 1700 aprox.).
- Gran demanda latente de infraestructura: exportación de infraestructura (transporte, energía) y otros.
- Reforzar los “vínculos especiales” basados en las relaciones históricas de amistad y solidaridad.
- América Latina abrió el horizonte de la diplomacia japonesa: allí fue la primera inmigración japonesa (en la actualidad hay en América Latina aproximadamente 1.780.000 nikkeis). Fue con países de esta región que Japón firmó el primer acuerdo en igualdad de condiciones y el primer acuerdo de asociación económica, entre otros.
- Un terreno con marcada afinidad a Japón: intercambio comercial, inversiones y asistencia que son mutuamente beneficiosos. Compartimos valores y vínculos históricos.
Los 4 resultados que se esperan obtener con esta visita
- Establecer y fortalecer las relaciones personales a nivel presidencial e impulsar el diálogo político en diversos niveles.
- Ratificar el fortalecimiento de la cooperación en el ámbito internacional con los países de América Latina que comparten los mismos valores fundamentales.
- Fortalecer las relaciones económicas con América Latina, incluyendo el apoyo a las empresas japonesas en la región.
- Dar impulso a los líderes de la próxima generación, a la amplia red humana y al intercambio cultural.
Las ideas que quiere transmitir el Primer Ministro japonés
Como mensaje sobre la política japonesa en relación a Latinoamérica, se destaca que la inversión y el comercio exterior son mutuamente beneficiosos; que además compartimos valores fundamentales y que Japón quiere “transmitir el vínculo original” (que se mantiene con estos países) construido por los nikkei, entre otros actores.
Por otra parte, pretende fortalecer la cooperación de Japón con América Latina en el marco de una “diplomacia japonesa que adopta una perspectiva panorámica del mapa del mundo” y de una América Latina que acrecienta su influencia en el ámbito internacional.
Por ejemplo, concretamente la cooperación entre Japón y América Latina abrirá nuevas fronteras, como la investigación conjunta entre Japón y Brasil sobre submarinos tripulados en aguas profundas; o la mayor frecuencia en las visitas del Primer Ministro del Japón y los miembros de su Gabinete a América Latina, al asignarle mayor importancia a la región. Por su parte, la intención también es transmitir las reformas de las políticas económicas del Japón (conocidas popularmente como “Abenomics”) y atraer inversiones a ese país.
“Juntos” en 3 principios
La palabra clave de la diplomacia japonesa hacia América Latina es “juntos”, concepto que se desarrollará en tres principios: 1) Juntos en el progreso; 2) Juntos en el liderazgo; 3) Juntos en la inspiración.
Juntos en el progreso: Construir una relación entre Japón y América Latina que mejore a ambos actores. Impulsar la cooperación para la formación de recursos humanos, en ámbitos de vanguardia, a la manera única de Japón.
Juntos en el liderazgo: Japón y América Latina cuentan con el potencial y la voluntad de mejorar a la comunidad internacional, revelar su potencial de liderazgo y abordar de forma conjunta posibles soluciones a los problemas internacionales.
Impulsar la realización de diálogos a nivel presidencial en América Latina para el fortalecimiento de la cooperación entre América Latina y Japón.
Juntos en la inspiración: Renovando la relación histórica de amistad, mejorar y profundizar el entendimiento y la compresión mutuos.
Presentar las historias de japoneses que hayan contribuido al desarrollo de América Latina, como la piscicultura del salmón en Chile, la explotación de Campo Cerrado en Brasil, etc.
Ampliar el intercambio humano y cultural que incluye a los nikkei y a los líderes de la próxima generación. Apoyar la educación del idioma japonés.
Info: Centro Cultural e Informativo de la Embajada de Japón en Argentina.
Edición: M. Hashimoto
Mirando las hojas caer
El invierno ya secó las hojas.
Sólo algunas quedan en las ramas
A dónde van las hojas que vuelan con el viento?
Ilustración: Kyuri Niikado; texto: Nasu Tomotari